Mujer joven busca empleo temporal y mal pagado
Fuente
Un estudio señala que los jóvenes tienen más difícil encontrar trabajo, sobre todo estable. Las mujeres lo tienen peor y, además, cobran menos.
Eva es una chica de 23 años. Eso significa que como mujer, tiene menos probabilidades de encontrar empleo que otro chico de su edad. Claro que su juventud también supone un problema para eludir el paro. Y en caso de conseguirlo, su condición femenina vuelve a relegarla, en este caso a un salario menor que el de un hombre que ocupe el mismo puesto. Eva es una chica inventada, pero eso no significa que no sea real.
El último informe estadístico del Observatorio Joven de Empleo en España convierte en números la ilusoria historia de Eva. Este estudio, que recaba datos de la situación laboral de los jóvenes entre 16 y 29 años, ha sido presentado por el profesor de Sociología de la Universidad Complutense de Madrid Esteban Sánchez en la sede del Consejo de la Juventud de la Comunitat Valenciana (CJCV).
El primer dato: la tasa de paro femenino superó en casi cinco puntos la masculina durante el segundo trimestre de 2007, al situarse en el 15,2 por ciento, frente al 10,5 por ciento del desempleo masculino.
Segundo dato: la tasa de desempleo de los jóvenes en España es 4,6 puntos superior a la de los trabajadores de cualquier edad, al situarse en el 12,6% frente al 8% de media.
Además, pone de manifiesto que las mujeres jóvenes siguen cobrando un 16,89% menos que sus compañeros de la misma edad.
La brecha más acusada en relación con la tasa de paro se encuentra entre los jóvenes con estudios primarios, ya que para los hombres es del 17,43% y para las mujeres del 30,4%.
Según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) en los que se fundamenta el informe, el paro es superior entre los jóvenes extracomunitarios, aunque con una diferencia "reducida" del 2,7% respecto a los de nacionalidad española.
Sector servicios
Por otra parte, el empleo joven se concentra en gran medida en el sector servicios (64,4% de los ocupados), donde la tasa de empleo femenina, del 85,7%, es muy superior a la de los hombres, que es de un 48,1%.
Además, en este sector la tasa de ocupación de extranjeros es del 56,3%, frente al 66,1% de trabajadores españoles o de otros países de la Unión Europea.
Esta relación se invierte en el sector de la construcción, donde se concentra el 25% de los ocupados extranjeros, frente a un 14,2% correspondiente a empleados españoles o de la UE.
En cuanto al nivel educativo, destaca en este informe que las menores tasas de paro se encuentran entre titulados de Formación Profesional de Grado Superior, donde el paro masculino es del 6,1%, la tasa más baja de todos los tramos educativos.
Es temporal
Respecto a las condiciones de empleo, la temporalidad es un rasgo transversal que afecta igualmente a hombres y mujeres y define la situación del mercado laboral juvenil.
La tasa de temporalidad juvenil es del 51,7 por ciento, aunque el porcentaje de contratos indefinidos aumenta con la edad.
El porcentaje de contratos indefinidos es menos frecuente entre los trabajadores de nacionalidad extranjera, un 47,7%, frente al 50,7% en el caso de los españoles.
La aportación del empleo público a esta situación de temporalidad es significativa, ya que se sitúa en el 51,4% para los hombres y el 73,3% entre las mujeres. Así, tres de cada cuatro mujeres jóvenes que trabajan para las instituciones públicas lo hacen de manera temporal.
Asimismo, destaca que el 8,4% de jóvenes que firmaron un contrato temporal durante el segundo trimestre de 2007, desconocen su naturaleza exacta.
Respecto a las condiciones de trabajo, la tasa de sobrecualificción por estar desarrollando un trabajo de nivel inferior a los estudios realizados afecta al 9,4% de las mujeres jóvenes y al 3,4% de los hombres.
La media de horas extraordinarias no pagadas es de 7,79 para los hombres y de 8,27 para las mujeres, y el subempleo por insuficincia de horas afecta al 12% de mujeres y al 8,5% de hombres. Así, las mujeres son las que buscan empleo con mayor frecuencia pese a estar trabajando, un 12,1%, frente al 8,7% de los hombres.
Un estudio señala que los jóvenes tienen más difícil encontrar trabajo, sobre todo estable. Las mujeres lo tienen peor y, además, cobran menos.
Eva es una chica de 23 años. Eso significa que como mujer, tiene menos probabilidades de encontrar empleo que otro chico de su edad. Claro que su juventud también supone un problema para eludir el paro. Y en caso de conseguirlo, su condición femenina vuelve a relegarla, en este caso a un salario menor que el de un hombre que ocupe el mismo puesto. Eva es una chica inventada, pero eso no significa que no sea real.
El último informe estadístico del Observatorio Joven de Empleo en España convierte en números la ilusoria historia de Eva. Este estudio, que recaba datos de la situación laboral de los jóvenes entre 16 y 29 años, ha sido presentado por el profesor de Sociología de la Universidad Complutense de Madrid Esteban Sánchez en la sede del Consejo de la Juventud de la Comunitat Valenciana (CJCV).
El primer dato: la tasa de paro femenino superó en casi cinco puntos la masculina durante el segundo trimestre de 2007, al situarse en el 15,2 por ciento, frente al 10,5 por ciento del desempleo masculino.
Segundo dato: la tasa de desempleo de los jóvenes en España es 4,6 puntos superior a la de los trabajadores de cualquier edad, al situarse en el 12,6% frente al 8% de media.
Además, pone de manifiesto que las mujeres jóvenes siguen cobrando un 16,89% menos que sus compañeros de la misma edad.
La brecha más acusada en relación con la tasa de paro se encuentra entre los jóvenes con estudios primarios, ya que para los hombres es del 17,43% y para las mujeres del 30,4%.
Según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) en los que se fundamenta el informe, el paro es superior entre los jóvenes extracomunitarios, aunque con una diferencia "reducida" del 2,7% respecto a los de nacionalidad española.
Sector servicios
Por otra parte, el empleo joven se concentra en gran medida en el sector servicios (64,4% de los ocupados), donde la tasa de empleo femenina, del 85,7%, es muy superior a la de los hombres, que es de un 48,1%.
Además, en este sector la tasa de ocupación de extranjeros es del 56,3%, frente al 66,1% de trabajadores españoles o de otros países de la Unión Europea.
Esta relación se invierte en el sector de la construcción, donde se concentra el 25% de los ocupados extranjeros, frente a un 14,2% correspondiente a empleados españoles o de la UE.
En cuanto al nivel educativo, destaca en este informe que las menores tasas de paro se encuentran entre titulados de Formación Profesional de Grado Superior, donde el paro masculino es del 6,1%, la tasa más baja de todos los tramos educativos.
Es temporal
Respecto a las condiciones de empleo, la temporalidad es un rasgo transversal que afecta igualmente a hombres y mujeres y define la situación del mercado laboral juvenil.
La tasa de temporalidad juvenil es del 51,7 por ciento, aunque el porcentaje de contratos indefinidos aumenta con la edad.
El porcentaje de contratos indefinidos es menos frecuente entre los trabajadores de nacionalidad extranjera, un 47,7%, frente al 50,7% en el caso de los españoles.
La aportación del empleo público a esta situación de temporalidad es significativa, ya que se sitúa en el 51,4% para los hombres y el 73,3% entre las mujeres. Así, tres de cada cuatro mujeres jóvenes que trabajan para las instituciones públicas lo hacen de manera temporal.
Asimismo, destaca que el 8,4% de jóvenes que firmaron un contrato temporal durante el segundo trimestre de 2007, desconocen su naturaleza exacta.
Respecto a las condiciones de trabajo, la tasa de sobrecualificción por estar desarrollando un trabajo de nivel inferior a los estudios realizados afecta al 9,4% de las mujeres jóvenes y al 3,4% de los hombres.
La media de horas extraordinarias no pagadas es de 7,79 para los hombres y de 8,27 para las mujeres, y el subempleo por insuficincia de horas afecta al 12% de mujeres y al 8,5% de hombres. Así, las mujeres son las que buscan empleo con mayor frecuencia pese a estar trabajando, un 12,1%, frente al 8,7% de los hombres.
0 comentarios