El Gobierno autonómico impulsa una FP a la carta. Aumentan los convenios con las empresas para especializar plantillas.
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La Formación Profesional en Aragón quiere alcanzar el mismo reconocimiento social del que disfruta ya en Europa. Y para lograrlo, el Departamento de Educación ha diseñado una FP a la carta: no solo se ofertará formación reglada a los estudiantes que llegan desde Secundaria o Bachillerato, sino que se abrirá a toda la sociedad. Por un lado acreditará a trabajadores sin titulación alguna, pero con suficiente experiencia laboral y, por otro, reciclará o actualizará las habilidades laborales de empleados de aquellas empresas o industrias que así lo demanden para satisfacer sus necesidades de producción. Paralelamente, la DGA impulsará iniciativas como la matrícula parcial y la ampliación de ciclos formativos a distancia.
Esta nueva concepción de la nueva FP, entendida como una formación continuada al servicio del ciudadano, constituye buena parte del II Plan Aragonés de FP, tal como aseguró ayer la directora general de Formación Profesional, Natividad Mendiara, en el inicio de curso de los 150 ciclos formativos que existen en Aragón y en el que están matriculados cerca de 16.000 alumnos. Esta cifra demuestra el progresivo aumento de la demanda social de unos estudios, antaño despreciados y que ha ido en aumento frente a los 12.000 estudiantes de 1999. "Nuestro objetivo es satisfacer la demanda de la economía aragonesa ofreciendo una mano de obra cualificada, y situarnos a nivel europeo, donde el 60% de los alumnos estudia FP y un 40% cursa estudios universitarios, justo al revés de lo que ocurre en España".
Por si no fuera suficiente, Natividad Mendiara recordó la rápida y elevada inserción laboral de aquellos que optan por la Formación Profesional en estos momentos, con cifras medias que rondan el 90% en los ciclos formativos de grado medio y del 84% en los de grado superior, tasas en cualquier caso, superiores a la media española. No obstante, hay ciclos formativos con una demanda del 100%.
"Además en los próximos años, el sector industrial en España va a precisar de 250.000 puestos intermedios, con profesionales cualificados. Y hay que prepararse para dar demanda a esta necesidad", destacó la responsable durante la visita guiada por los ciclos del IES Corona de Aragón. De hecho, este centro es un buen ejemplo de la apertura a la sociedad y de su colaboración con las empresas, ya que dispone de un centro mecanizado, capaz de fabricar piezas para sectores como la automoción y la aeronáutica.
La Formación Profesional en Aragón quiere alcanzar el mismo reconocimiento social del que disfruta ya en Europa. Y para lograrlo, el Departamento de Educación ha diseñado una FP a la carta: no solo se ofertará formación reglada a los estudiantes que llegan desde Secundaria o Bachillerato, sino que se abrirá a toda la sociedad. Por un lado acreditará a trabajadores sin titulación alguna, pero con suficiente experiencia laboral y, por otro, reciclará o actualizará las habilidades laborales de empleados de aquellas empresas o industrias que así lo demanden para satisfacer sus necesidades de producción. Paralelamente, la DGA impulsará iniciativas como la matrícula parcial y la ampliación de ciclos formativos a distancia.
Esta nueva concepción de la nueva FP, entendida como una formación continuada al servicio del ciudadano, constituye buena parte del II Plan Aragonés de FP, tal como aseguró ayer la directora general de Formación Profesional, Natividad Mendiara, en el inicio de curso de los 150 ciclos formativos que existen en Aragón y en el que están matriculados cerca de 16.000 alumnos. Esta cifra demuestra el progresivo aumento de la demanda social de unos estudios, antaño despreciados y que ha ido en aumento frente a los 12.000 estudiantes de 1999. "Nuestro objetivo es satisfacer la demanda de la economía aragonesa ofreciendo una mano de obra cualificada, y situarnos a nivel europeo, donde el 60% de los alumnos estudia FP y un 40% cursa estudios universitarios, justo al revés de lo que ocurre en España".
Por si no fuera suficiente, Natividad Mendiara recordó la rápida y elevada inserción laboral de aquellos que optan por la Formación Profesional en estos momentos, con cifras medias que rondan el 90% en los ciclos formativos de grado medio y del 84% en los de grado superior, tasas en cualquier caso, superiores a la media española. No obstante, hay ciclos formativos con una demanda del 100%.
"Además en los próximos años, el sector industrial en España va a precisar de 250.000 puestos intermedios, con profesionales cualificados. Y hay que prepararse para dar demanda a esta necesidad", destacó la responsable durante la visita guiada por los ciclos del IES Corona de Aragón. De hecho, este centro es un buen ejemplo de la apertura a la sociedad y de su colaboración con las empresas, ya que dispone de un centro mecanizado, capaz de fabricar piezas para sectores como la automoción y la aeronáutica.
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