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La flexibilidad del mercado laboral español a examen

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Cuando se habla de la situación del mercado de trabajo en España, se tiende a centrar la atención en las cifras actuales de generación de empleo y tasa de paro. Aún sin obviar su importancia, la radiografía que ofrecen de su comportamiento es incompleta.
Un mercado laboral dinámico no es sólo aquel capaz de absorber mano de obra en una etapa del ciclo económico expansivo, sino el que goza de flexibilidad suficiente como para adaptarse a las exigencias del nuevo entorno empresarial, reduciendo las diferencias que todavía hoy persisten en la contratación por sexos y edad y buscando el equilibrio entre la temporalidad y el trabajo indefinido.
Los organismos internacionales no dudan en rasgarse las vestiduras para tildar de “poco flexible y versátil” al mercado laboral español. Y es que si nos detenemos a analizar en términos comparativos ciertas variables sintomáticas de la existencia de “barreras laborales”, la brecha entre España y el grupo de países más desarrollados se hace patente.
Las rigideces se dan tanto en la fase de contratación (pese a los esfuerzos recientes por fomentar la generación de empleo y reducir la temporalidad) como en la de despido. El precio de la destitución en España supera hasta siete veces la media de la OCDE, lo que acaba generando un modelo dual de empleados indefinidos, para los que la protección al empleo fijo se convierte en incentivo a la permanencia en el puesto, y temporales, concentrados en el colectivo de jóvenes y mujeres.
Este escenario, que también se dibuja para Alemania, Francia o Japón, contrasta con el existente en EEUU, Reino Unido o los países escandinavos.
Por tanto, la agenda laboral de nuestro país debería fechar el abaratamiento de las restituciones de empleados fijos; la reducción de incentivos a trabajar hasta edades avanzadas o la creación de un “contrato único” que vincule el coste del despido a la vida laboral del individuo, como objetivos inmediatos. La eficiencia del aparato productivo y la apertura del sector empresarial al cambio tecnológico seguro lo agradecerían. 

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